Chicotazos • Victoriano, lastre del PT Guerrero Por Francisco Javier Flores V.

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• Victoriano, lastre del PT Guerrero

Por Francisco Javier Flores V.

Una de las peores decisiones tomadas por la dirigencia nacional del Partido del Trabajo fue haber apoyado al ex perredista Victoriano Wences Real para llegar a la dirigencia de dicho instituto político en Guerrero, y hoy simple y sencillamente se están viendo las consecuencias.

A este personaje no solamente se le deben los magros resultados obtenidos en el pasado proceso electoral en la entidad, en donde quizá su máximo logro fue colocar a su esposa Leticia Mosso Hernández como diputada local plurinominal y negociar para que por esa misma vía llegara al Congreso local el dirigente transportista Servando de Jesús Salgado.

Además de ser el responsable de que cuadros valiosos del petismo en el estado desertaran para irse a probar suerte en otras filas, ante la actitud autoritaria y prepotente del oriundo del municipio de Tecpan de Galeana, lo que provocó que junto con esos liderazgos se fueran cientos, tal vez miles de militantes, a Victoriano es el mismo electorado el que se ha encargado de echarle en cara su mal proceder.

En 2015, cuando postuló a su propia esposa para la alcaldía de Tlapa buscando que lo sucediera en el cargo, luego de su desastrosa administración como presidente municipal, la ciudadanía le cobró la factura y le dijo no a su ambiciosa aspiración de seguir enriqueciéndose a costilla de los recursos del pueblo tlapaneco.

En esa ocasión la suerte no lo abandonó del todo pues logró colocarse como diputado federal, desde donde con intrigas, mentiras y otras artimañas engatusó y convenció a la dirigencia nacional para que removiera a la dirigencia local y lo colocaran a él en la comisión política. Peor decisión no pudo haber tomado, pues en actitud revanchista Wences Real llegó con la espada desenvainada obligando a los liderazgos tradicionales a buscar la salida.

El proceso electoral anterior fue la mejor muestra de su incapacidad como dirigente partidista, pues su propia mezquindad impidió se concretara la alianza con el partido Morena a nivel local y que el PT pudiera hoy disfrutar de más espacios políticos con cuadros verdaderamente representativos, e incluso no fue capaz ni siquiera de defender el escaño que por equidad de género correspondía a la feminista Delia Figueroa Salas, quien ya había sido declarada diputada electa por el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana, pero que le fue tumbada en la mesa, ante la indiferencia del líder local del PT.

Eso sí, se auto adjudicó nuevamente la candidatura a la presidencia municipal de Tlapa, en donde también de nuevo los tlapanecos le hicieron ver su triste realidad propinándole una estrepitosa derrota en las urnas.

El fracaso de Victoriano Wences Real como dirigente estatal del PT en Guerrero es tal, que incluso desapareció las oficinas partidistas en Tlapa, pero ¿qué creen? Vivillo como es, convirtió esas instalaciones en un colegio particular, volviéndose de la noche a la mañana empresario de la educación. ¿Será que ahora quiere incursionar en ese rubro? Mal harían si se lo permitieran.

A estas alturas, seguramente la dirigencia nacional está haciendo las evaluaciones del desempeño de este personaje, y no es aventurado afirmar que muy pronto le llegue el relevo, para colocar en la dirigencia a algún militante –hombre o mujer- que realmente sienta el color de la camiseta. Y vale que aún quedan, pese a los que desertaron por culpa de Wences del PT en Guerrero.