Suelo Rojo • Colorada: La hora de la verdad Por Francisco Javier Flores V.

Suelo Rojo

• Colorada: La hora de la verdad

Por Francisco Javier Flores V.

A casi un día de que se lleven a cabo las elecciones, y luego de que a la medianoche del pasado miércoles concluyó la etapa de campaña de los diferentes candidatos a la presidencia municipal de Juan R. Escudero, los nervios están de punta en cada uno de los partidos políticos pues lo que hayan hecho o dejado de hacer los candidatos en la etapa de proselitismo quedó atrás.

La hora de la verdad se acerca y a estas alturas, quienes hayan sido convencidos por las propuestas de los candidatos ya tienen decidido a quién le van a dar su confianza y es muy difícil que cambien el sentido de su voto. Este es el voto razonado, de conciencia, el que se emite convencido de que por quien van a sufragar es la mejor propuesta y con esa idea despertarán el próximo domingo para acudir a las urnas.

El problema es que quienes piensan de esta manera son una minoría, lamentablemente. El grueso de los ciudadanos votantes está a la espera de vender miserablemente su voto. Esa es la realidad. Lo trágico de esto es que ni siquiera se trata de gente que viva en extrema pobreza, y que ve en el tiempo de elecciones una forma de alivianarse con un dinerito. Podría asegurar que incluso la gente más humilde es la más digna y no se deja engañar ni sorprender.

Por desgracia muchos de quienes comercian con su dignidad y venden su voto al mejor postor son gente que no tiene necesidad, pero que desafortunadamente se acostumbraron al dinero fácil, a esa dádiva que por lo mismo que la obtuvieron por medio de la transa, se la gastarán ese mismo domingo comprando clandestinamente cerveza y emborrachándose para festejar que “su” candidato o candidata ganó. Esos 200 o 500 pesos ni siquiera les van a servir para salir de una necesidad apremiante.

A nivel estatal es vergonzoso el escenario que han montado los priístas comprando el voto sin ningún rubor, con la gente haciendo filas con su copia de la credencial de elector en mano, rayando en el descaro y la desfachatez, tanto por quienes dan el dinero como por quienes lo reciben. Este escenario se replica en casi todo Guerrero, tristemente.

En Juan R. Escudero es innegable que se requiere de un cambio drástico. El municipio ya no aguanta ser gobernado por los mismos de siempre. Por la misma familia, por las mismas caras, así cambien de un partido a otro, siempre son los mismos. Eso ya no se debe permitir. Como tampoco se debe permitir que un ejercicio democrático se convierta en una elección de miedo, pensando que si no gana el candidato de los civiles armados mal llamados policías comunitarios las cosas van a empeorar. 

Hace ya mucho que esos sujetos dejaron de tener la confianza de la gente y el candidato que lo utiliza como brazo armado no tiene vergüenza y no merece gobernar a un municipio que lo que reclama es paz y tranquilidad.

Juan R. Escudero está destruido, necesita alguien que sepa construir y lo haga desde los cimientos. Es necesario que los ciudadanos se pongan en movimiento. Ojalá lo entiendan.