Chicotazos • El factor Jacko XV (El fenómeno del ¡Jálalo que es pargo!) Por Francisco Javier Flores V.

Chicotazos

• El factor Jacko XV

(El fenómeno del ¡Jálalo que es pargo!)

Por Francisco Javier Flores V.

A estas alturas de la contienda electoral, cuando faltan exactamente 15 días para que concluyan las campañas proselitistas y 19 para que se lleven a cabo las elecciones, no hay duda de quién cuenta ya con las preferencias entre los votantes y se perfila como el ganador indiscutible en la jornada que se verificará el primero de julio.

Joaquín “Jacko” Badillo Escamilla ha roto todos los pronóstico y de un simple soñador por la candidatura de alguno de los partidos políticos grandes, cuando aún ni siquiera se sabía que éstos abrirían las puertas a miembros de la sociedad civil, como es su caso, hoy es candidato de la alianza de tres de las principales fuerzas políticas del país y es quien marca la agenda de la campaña en Acapulco, quien trae a la mesa los temas que realmente importan a los acapulqueños y en consecuencia el de las mejores propuestas.

Es impresionante observar el caudal de simpatías que ha logrado amalgamar entre amplios sectores de la sociedad el candidato de la coalición PRD, PAN y Movimiento Ciudadano. Basta acompañarlo un rato en sus recorridos para darse cuenta del cariño y respaldo que recibe de la gente, lo mismo del discapacitado que al verlo parar en el alto del semáforo se le acerca para pedirle “una gorra tuya Jacko, ya me quiero quitar esta chingadera” (en referencia a la que trae puesta con emblema tricolor), que de los brigadistas del partido del Peje que sin titubeos, aún con las banderas de ese partido en mano, se acercan para decirle “¡estamos contigo Jacko, jálalo que es pargo!”.

Y es que esta frase original de los pescadores acapulqueños cuando sienten que ya “picó” fuerte la cuerda con el anzuelo y carnada, se ha convertido en todo un fenómeno, en un grito de batalla que engloba todo el sentimiento de un pueblo que ya no aguanta más la crítica situación que se está viviendo, sobre todo en materia de seguridad, y que cifra su esperanza en este hombre de mediana estatura que es un experto en la materia.

Así se lo gritan los niños con el pulgar arriba cuando lo ven pasar, los vendedores ambulantes a quienes acostumbra saludar de mano, comentar con ellos y hasta echar uno que otro chascarrillo mientras los invita a ser parte del cambio con seguridad que enarbola. Así le dicen los policías que se detienen a saludarlo, los meseros en los restaurantes, las amas de casa que salen a sus puertas a recibirlo; los taxistas que sonando el claxon y desde sus unidades lanzan “¡duro Jacko, y jálalo que es pargo!”, y éste contesta de inmediato “¡con todo y sin miedo tigre, vámonos recio!”.

El factor Jacko en Acapulco ha cimbrado las conciencias, sembrado esperanza y motivado a mucha gente que se había mantenido apática a los procesos electorales a salir y ejercer ese derecho de decidir el destino que quiere para sus hijos. Es pargo, hay que jalarle este domingo primero de julio. Con todo y sin miedo tigres.