Exigen
garantizar integridad
de reo acusado
de secuestro
·
Es uno
desplazados de La Laguna, Coyuca de Catalán; temen lo priven de la vida si es
trasladado a un penal de aquella región
Francisco Javier Flores V.
 |
| En defensa de garantías. |
Organismos defensores de
derechos humanos y familiares de Gildardo Díaz Pérez, quien fue aprehendido la
tarde del pasado miércoles 18 de marzo en el retén de Bajos del Ejido, con base
en una orden de aprehensión que existe en su contra por el delito de secuestro
en el municipio de Coyuca de Catalán, demandaron a las autoridades garantizar
su integridad física así como el acceso a un debido proceso, toda vez que,
aseguran, el delito que le imputan a él y a otra veintena de personas que aún
no han sido detenidas, es fabricado.
En conferencia de prensa
Manuel Olivares Hernández, director del Centro Regional de Defensa de los
Derechos Humanos “José María Morelos y Pavón” y Bertoldo Martínez Cruz,
dirigente del Frente de Organizaciones Democráticas del Estado de Guerrero
(Fodeg), indicaron que Gildardo Díaz, quien se encuentra recluido en el penal
de Chilpancingo, “es un campesino que fue desplazado forzosamente de su
comunidad, La Laguna, del municipio de Coyuca de Catalán, en abril del 2011 y
en noviembre del 2012, éste último, después de que fuera ejecutada la señora
Juventina Villa Mojica y uno de sus hijos”, presuntamente por miembros de la
delincuencia organizada que desde entonces mantiene asolada aquella región.
Dijeron que ante el riesgo de
que el detenido sea trasladado al penal
de Coyuca de Catalán, tienen el temor de que corra la misma suerte que Joel
Santana Villa –hijo de Juventina-, detenido en julio de 2011 y encarcelado en
el Centro de Readaptación Social de Iguala, en cuyo interior fue privado de la
vida el 2 de diciembre de ese mismo año, obligándolo a beber plaguicida
justamente cuando estaba a punto de recobrar su libertad.
Acompañados de Mariana Díaz
Pérez y Juana Alonso Ochoa, hermana y
suegra, respectivamente, de Gildardo Díaz Pérez, los defensores abundaron que
éste es acusado del secuestro de Homero Muntúfar Pineda, familiar de los
conocidos políticos y funcionarios de diferentes niveles de gobierno, Erit y
Saúl Montúfar Mendoza, quienes ejercen en aquella región un cacicazgo e incluso
han sido vinculados con grupos del crimen organizado.
Lo curioso del caso es que por
ese mismo secuestro están acusadas por lo menos otras veinte personas, entre
ellos niños y mujeres, todos ellos desplazados de La Laguna, pueblo que
actualmente se encuentra desierto pues ante el embate de la delincuencia muchos
se desplazaron a Las Ollas, otros se refugiaron en Ayutla y otros más en
Acapulco, lo cual los hace suponer que el trasfondo de esas denuncias y hoy
causas penales es que ya no regresen a su lugar de origen.
La hermana del detenido aseguró
que Gildardo es inocente, pues si fuera secuestrador, dijo, “no estaríamos así
de jodidos”, además de recordar que el gobierno del estado se comprometió a que
se iba a revisar esa denuncia y que nadie iba a ser detenido, “pero con esto
estamos viendo que el gobierno es cómplice de la delincuencia, somos víctimas
del propio gobierno, ya no sabemos ni pa’ dónde darle porque ahora el mismo
gobierno nos está chingando; allá ya no tenemos nada, ya nos quitaron hasta nuestras tierras”, expresó
en peculiar acento entre calentano y sierreño.
Pidieron que al detenido lo
mantengan en Chilpancingo o en Acapulco, pero no a Coyuca de Catalán, pues
adviertieron que si lo hacen así, “no va a durar ni tres días cuando ya lo
maten”.
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