Nada Personal
• En aumento la desaparición de jovencitas en Guerrero
• ¿Y la alerta de género? Simplemente no funciona
Por Kenia Guzmán Pérez
Kenia Guzmán Pérez. Periodista. |
El delito de trata de blancas y desaparición forzada de adolescentes y mujeres jóvenes es grave en Guerrero, y sobre todo en la capital Chilpancingo, donde últimamente se han registrado varios casos de chicas estudiantes desde el nivel secundaria, preparatoria y universitarias, que han sido desaparecidas sin que hasta la vez se sepa de su paradero.
Todo ello derivado, sin duda, de la proliferación de los grupos del crimen organizado y de las bandas de delincuentes que operan en los municipios de Chilpancingo y sus alrededores que además de los delitos de narcotráfico, secuestro, cobro de piso, también ahora se dedican a la trata de blancas y rapto de niñas adolescentes y jóvenes para el comercio sexual. Prueba de ello fue recientemente el desmantelamiento de una casa descubierta en la Ciudad de Taxco de Alarcón, donde operaban los integrantes de un grupo delictivo manteniendo cautivas a menores de edad que mantenían secuestradas desde algunos años. Asimismo, algunas eran obligadas a ser cómplices en el trasiego de enervantes y otros delitos.
En tanto que otras chicas tienen otros destinos en el resto de la República o los Estados Unidos.
En Acapulco también se han dado casos registrados como el que fue denunciado por una madre de la Ciudad de México, que acusó a una banda de comerciantes ambulantes de haberla secuestrado. Aunque no supimos el paradero de esa joven, por la propia mamá se supo que las autoridades policiacas se negaron a investigar el caso, argumentando que esta había huido por su voluntad.
Obviamente suele suceder que algunos casos tienen que ver con la "huida" de muchachas con el novio, amigos o hombres mayores que ellas, que a las pocas horas aparecen y se aclaran los hechos.
Pero muchos casos también han tenido un trágico final pues aparecen muertas en los barrancos y lugares apartados, sin que tampoco se investigue por parte de las autoridades judiciales esos crímenes.
Lo que significa que en Guerrero es fácil desaparecer y matar a una mujer, porque no se investiga desde el principio y tampoco el fin de estos delitos. Hoy en Ciudad Renacimiento amaneció una mujer muerta a pedradas en plena mancha urbana. Un asesinato que se advierte fue hecho con saña y odio. Así como muchas más que han aparecido acribilladas a balazos o destazadas.
Qué pasa?, Por qué siguen ocurriendo estos crímenes si ya contamos con una alerta de género en los principales municipios de Guerrero. Simplemente porque tenemos una Fiscalía a la que no le interesan los crímenes contra mujeres y se niega a reconocerlos como feminicidios, unas agencias del Ministerio Público y policías que no hacen su labor y no investigan. Porque tenemos unos jueces que liberan a los violadores y no actúan con perspectiva de género.
Y lo peor tal vez, porque tenemos un gobernador indolente e insensible que nunca habla, nunca interviene y se esconde cuando hay casos difíciles. Cuando acribillaron a un periodista de Sinaloa, el gobernador de ese estado enfrentó el caso rápido y se comprometió ante el gremio periodístico a hacer justicia. Aquí mataron al periodista Cecilio Pineda y el gobernador brilló por su ausencia.
En Puebla, sucedió el feminicidio de la joven Mara Fernanda Castilla, y el gobernador de ese estado salió de inmediato a dar las condolencias y prometió justicia.
Qué le pasa a nuestro gobernador Héctor Astudillo que nada más festeja los días en contra de la violencia contra mujeres y niñas a través de fotos en las redes sociales, pero no aplica realmente la justicia en los casos que se presentan.
No quiero hacer linchamiento en contra del gobernador, pero creo que sí ha faltado mucha sensibilidad para muchos crímenes de mujeres y niñas que podrían ser inocentes. En Guerrero, las mujeres y las niñas son las más vulnerables ante el crimen organizado y la violencia generalizada. Si las mujeres no están seguras en su propia casa, mucho menos en las calles por la falta de vigilancia y actuación de los cuerpos policíacos. El 911 no sirve. No contestan y si llegan a contestar no prestan el auxilio correspondiente.
Hoy los familiares de la joven Alejandra Manzanárez Hernández tuvieron que hacer una marcha para exigirle al gobernador su apoyo e intervención ( ante quién?) para la liberación de la desaparecida, que dicen ya llamó a su mamá y dice fue liberada en Cuernavaca . Ojalá sea cierto. De la otra niña Fátima no se sabe aún nada. Esperemos aparezca.
Por lo visto es necesario hacer manifestaciones para obtener una respuesta. Y más ahora que se acerca el segundo informe de gobierno, este evento pudo haber empañado la publicidad del mandatario estatal, donde que se trata también de una chica guapa conocida en la capital.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario