Médula
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Astudillo, alerta y cambios
Por Jesús Lépez Ochoa
Jesús Lépez Ochoa. Periodista. |
Los teóricos del conflicto
coinciden en que éste es el detonante de la creatividad en el ser humano para
la generación de soluciones.
El gobernador Héctor Astudillo
Flores haría bien en aprovechar la nueva alerta de viaje emitida por los
Estados Unidos para dar un golpe de timón no solamente en la estrategia de
seguridad, sino en la que tiene que ver con la promoción turística e incluso
con la comunicación oficial de su gobierno.
El espejo no es culpable de su
reflejo. Guerrero es víctima de la psicosis interna y externa que se ha dejado
crecer por una deficiente promoción turística y una comunicación reactiva e
incluso descoordinada y sin objetivos
precisos en lo que se refiere al tema que más inquieta a guerrerenses y
foráneos que tienen aquí sus centros vacacionales preferidos: la seguridad.
En lo que a promoción
turística se refiere existe el Fideicomiso de Promoción Turística (Fidetur) que
administra el dinero que se le cobra a los turistas por hospedarse en hoteles
de Acapulco, no ha sido auditado desde hace varios años, pese a la evidente
falta de resultados en este tipo de casos.
En la comunicación oficial del
gobierno estatal, hemos visto una falta de coordinación con la Fiscalía que se
ha vuelto común que informe una cosa mientras el gobernador dice otra, pero
también que Astudillo tiene que salir siempre reaccionando a problemas, y no a
comunicar logros significativos en materia de seguridad.
Una honrosa excepción fue la
captura reciente de unos peligrosos secuestradores que fue dada a conocer
personalmente por el gobernador.
Un elemento aprovechable son
las Bases de Operaciones Mixtas inauguradas por el alcalde de Chilpancingo
Marco Antonio Leyva Mena, precisamente al día siguiente de la alerta emitida
por el Departamento de Estado.
A esta acción el gobernador
puede sacarle mucho provecho en materia de lo que se está haciendo en los
municipios afectados por la violencia para combatir esa situación.
Otro aspecto descuidado es el
del arropamiento que debe haber desde su partido el PRI, vemos que el dirigente
José Parcero López ya hace eventos y da declaraciones de vez en cuando, pero
nunca sobre los temas coyunturales como es el caso.
Los presidentes municipales
también juegan un rol importante. No es posible que el PRI vaya para medio año
sin un coordinador de alcaldes.
El hecho de que ya no sean
oposición no implica que ya no tengan necesidad de hacer gestiones en bloque, y
por el contrario, les da otra tarea políticamente importante: arropar a su
gobernador, como lo hace el PRD con sus autoridades hasta porque se les
apareció un fantasma y les sacó la lengua.
Así las cosas, es el momento
para que Héctor Astudillo llame a cuentas a sus colaboradores, haga los cambios
pertinentes e invite a su partido a ponerse las pilas.
jalepezochoa@gmail.com
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