viernes, 26 de febrero de 2016

Nada Personal. De la guerra sucia a los dimes y diretes. Por Kenia Guzmán Pérez

Nada Personal

·         De la guerra sucia a los dimes y diretes

Kenia Guzmán Pérez

Kenia Guzmán Pérez. Periodista.
Hoy lo vi en su monumental camioneta Titán de lujo aperlada. Seguido de otra Suburban negra polarizada. Seguramente de su equipo de seguridad. A su paso se  respira el poderío. El poder del dinero, la ostentosidad  y la posición política.
“Es Walton”, escuché la voz de alguien que estaba atrás de mí, y quienes también lo reconocieron a su paso por las instalaciones del ex Ineban.
Impecable del rostro. Con las facciones delineadas. El ex alcalde de Acapulco se veía sereno dentro del aire acondicionado de su camioneta. Tranquilo, desparramado en su asiento del copiloto. Como que nada le preocupara. Se veía que llevaban prisa, tal vez a alguna entrevista importante o simplemente a un negocio personal.
La supuesta guerra sucia que trae contra el grupo político del alcalde Evodio Velázquez se ve que  no le hace mella. En la única entrevista radiofónica que ha concedido Luis Walton asegura que él no estuvo en esa reunión para fraguar un linchamiento contra el joven presidente municipal. Dice que no es su voz o que si  lo es fue editada ya que él siempre ha sostenido que se contrate al Colegio de Contadores para que auditen las últimas tres administraciones. Le echa la culpa al tal Beto Carrera, quien dice tendrá que dar las explicaciones pertinentes de esa conspiración.
Orgulloso el ex alcalde dice que no le interesa reunirse con Evodio, ni aclarar todo este asunto de la campaña de desprestigio que supuestamente planeaban en contra del perredista. Al contrario, se defiende de que ha sido el único desprestigiado en las redes sociales es él, a quien lo acusan del aumento de la deuda del ayuntamiento. Y pide que hagan la denuncia ante la AGE.
Lo cierto de todo esto, es que ambos protagonistas, junto con sus grupos políticos que los cobijan, se ven como políticos de poca monta. Están demostrando, unos por conspirar al estilo más burdo, y los otros por hacerse los espantados; su baja calidad moral y política. De antemano, es sabido que esto se da por lo general en las campañas políticas, cuando entran en la recta final. Y que los políticos mexicanos son en su mayoría personas sinvergüenzas y sin escrúpulos.  No hay de que asustarse. Esto siempre ha pasado desde los tiempos de Elías Calles y Salinas de Gortari.
El hecho es que hoy existen las redes sociales y todo lo oculto de pronto se vuelve “viral”. Lo curioso es que el fenómeno viral o la “conspiración” fallida resultó ser entre dos partidos, uno que se dice social y el otro que aún se consideran “de izquierda”. Ja! Que infantiles se vieron los perredistas seguidores de Evodio, ante este grupito de nuevos políticos de MC. No cabe duda que lo siguen chamaqueando. Y aquí quedaría bien el dicho que reza: “El que se lleva se aguanta”


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